Sinceramente tengo cientos de cosas más para decir sobre marketing y branding, pero ya quiero terminar con este libro de una vez, así es que nos vemos en la próxima.


EL CLIENTE ES BASURA 2


NEUROBRANDING

Quindt, Nicolás Alejandro

Este libro es una mierda, no lo compre : neurobranding en la era digital / Nicolás Alejandro Quindt. - 1a ed . – Buenos Aires : Nicolás Alejandro Quindt, 2018.

Libro digital

Archivo Digital: descarga y online

ISBN 978-987-42-9510-1

1. Marketing. 2. Marketing Estratégico. 3. Negocios. I. Título.

CDD 658.83

© Nico Quindt2018

Queda hecho el depósito legal establecido por la ley 11.723.

El libro que todo emprendedor debe leer antes de iniciar su negocio


¿Cómo estoy tan loco de ponerle semejante título a este libro? Porque conozco a quien lo compró, te conozco y sé perfectamente cómo funciona tu cerebro. Estoy seguro de que esperas encontrar originalidad en este libro y es precisamente lo que hallarás. Aquí no voy a irte con rodeos ni voy a perder el tiempo en estupideces que tú no quieres leer y que yo no quiero escribir.

No soy un gurú ni un ser iluminado, solo investigo, estudio, leo, me capacito y lo intento una y mil veces hasta que triunfo o fracaso, y de esos errores o aciertos es que tengo material suficiente para recopilar y compartirlo contigo.

Sé que estás buscando información renovada, clara y concisa, pero sobre todo honesta. Y eso es lo que voy a darte. Y si no te gusta el contenido, puedes irte cuando lo desees ya que no te conozco y lo que pienses de mí o de mi libro no me afecta en lo más mínimo.

El cliente te cancela, falta a una reunión, no te envía el material que le solicitaste, grita en tu propio negocio, te insulta, no te paga en fecha… pero eso no importa, tu tiempo no es importante para él, tu arancel puede esperar y no se te ocurra reclamarle, porque acabarás sintiendo vergüenza tú de decirle que te pague. Y mientras te hace trabajar, está buscando un reemplazo a tus espaldas.

¿Por qué sucede todo esto? Como mencioné en la primera parte de esta serie de libros, le hemos otorgado un poder al dinero que no le corresponde, el dinero es la mejor herramienta de cambio que se pudo inventar, pero hemos creído que con él podemos comprar cosas que no están a la venta como el tiempo y la vida, y consideramos que con el dinero hacemos o rompemos todas las reglas.

El cliente no entiende bien lo que haces, cree que está pagándote por nada, o que él podría hacer tu trabajo. Comienza con exigencias inéditas y con reclamos innecesarios el descenso ineludible a convertirse en basura. Quiere ver resultados inmediatos en procesos que son a largo plazo y que se mantengan resultados extendidos en el tiempo en cosas que son efímeras.

Pasado un lapso, comienza a aburrirse de que tú no hagas magia, de que no tengas la fórmula secreta para lograr los objetivos que él desea, porque algún idiota lo convenció de que eso existe, y cuando se fastidia comienza a pensar que tú eres un inútil y que tu trabajo no es tan bueno o que él podría hacerlo mejor.

Aunque un vendedor de productos con atención al público tiene que lidiar directamente con los clientes de estas características, la tiene bastante más fácil que un profesional o un vendedor de servicios. El vendedor de servicios está expuesto a todo tipo de clientes basura.

Tuve la suerte o la desgracia de nacer en un país donde la estafa es considerada como un arte. En Argentina, el personaje del estafador es tan común que abunda como las moscas en el verano.

He trabajado para empresas que incluso tenían un reglamento a seguir:

1. Hazlo así nomás.

2. Total, no es para mí.

3. Aquí no voy a vivir yo.

Siguiendo este manual es que brindaban servicios.


En este momento, puedo asegurar que, el haber convivido y trabajado con esas personas que eran un imán para clientes basura, me ha otorgado el poder de identificarlos a leguas de distancia. Desgraciadamente, mutan con el tiempo, cambian de estrategias, se disfrazan cada vez mejor y cuesta horrores reconocerlos hasta que ya es muy tarde.

El cliente basura es el último eslabón de una cadena que viene forjándose desde el comienzo, en este libro me propongo ir hasta los inicios de una marca a tratar de entender por qué tu empresa no se convirtió en basura que atrae clientes basura, sino que fue basura desde el principio, solo que tú no lo notabas.

¿Por qué es tan difícil vender?

¿Por qué es tan complicado conservar a un cliente o hacer que ese cliente regrese?

¿Terminas al final del día estresado con las demandas de tus clientes?

¿Por qué te pasas explicando una cosa y el cliente entiende otra?

¿Por qué el cliente entiende lo que le conviene y lo que creías que había quedado claro hay que volver a detallarlo?


Aunque no lo creas, las respuestas a estas preguntas no tienen nada que ver con la venta ni con el cliente, siquiera con el marketing que estás desarrollando, sino que provienen de mucho más profundo, de la concepción de la marca como tal, de la falta de información adecuada a la hora de establecer una buena estrategia de branding.

Si eres bueno en tu trabajo puedes elegir tú mismo con qué clientes vas a trabajar.


Si los micronichos identifican a un público especifico, dentro de ese público tenemos que seleccionar a nuestros clientes. Hacer una selección de clientes a los que me interesa ayudar con mis servicios y que ellos me ayuden a cumplir mis objetivos económicos con el dinero que me pagan, es una verdadera tarea aparte. Si mi rubro es la venta no me va a interesar a quién le venda, pero si me negocio es la prestación de un servicio, créeme que encontrar al cliente correcto es todo un desafío, y encontrar al cliente incorrecto es toda una calamidad.

Tuvimos durante tanto tiempo a clientes basura que uno podría llegar a pensar que cuando somos clientes deberíamos comportarnos con más comprensión, debido a que ya estuvimos en esa situación, pero no, lamentablemente nos volvimos basura, y ya que nos comportamos de manera irracional frente al dinero y los negocios, tengamos bien en claro que cometeremos errores e idioteces de toda índole.

ESTE LIBRO ES UNA MIERDA NO LO LEAS


¿Por qué estás leyendo este libro si te digo que es una mierda? Por una sola razón: no creemos en la publicidad. No creemos en lo que nos venden. Queremos comprar, pero no que nos vendan. Queremos elegir lo mejor, pero no que elijan por nosotros.

La mayor parte de nuestro tiempo somos consumidores, clientes por decirlo de alguna manera, incluso cuando dormimos estamos consumiendo una cama, un colchón, sabanas, seguridad que proteja nuestros sueños y a nuestra familia, calefacción, etc. Y cuando tenemos el poder como consumidores, rechazamos las órdenes y abrazamos las exigencias. Y muchas veces, de acuerdo con la cantidad de frustración que traigamos aparejada, esa calidad de exigencia que tenemos para con los demás, que bajo ningún punto es la misma exigencia que nos ponemos a nosotros mismos, nos convierte (como ya lo dije en mi libro anterior) en BASURA. Exigimos, demandamos, reprochamos, criticamos y nos quejamos del trabajo del otro con una impertinencia tan alta como de igual manera nos disgustamos cuando alguien nos hace las mismas exigencias a nosotros en cuanto a nuestro trabajo, producto, servicio o profesión.


Nicolás Quindt


ESTE LIBRO ES UNA MIERDA, PERO YA LO COMPRASTE

Blanco

logotipos-color-blanco

Tiene mucha aceptación en los clientes refinados y con tendencia a cerrarse en sus ideas.

Representa la pureza, higiene, transparencia, paz, inocencia, limpieza y seguridad.

Puede combinarse con cualquier otro color para intensificar algún aspecto positivo de una marca.

Diferencia entre producto y marca


Un producto se elabora en una fábrica.

Una marca se crea en la mente del consumidor.

Un producto es un objeto.

Una marca es una personalidad.

A un producto lo vende el comerciante.

La marca es comprada por el cliente.

El producto puede ser copiado.

La marca es única.

Un producto pasa de moda en determinado tiempo.

Una marca puede perdurar en el tiempo.

La marca atraerá clientes fieles si se logra transmitir un mensaje claro para diferenciarse del resto.

La misma prenda tiene diferente valor solo por la marca.

¿Qué es el branding?


Branding, propiamente dicho, es el proceso de construcción de una marca.

Brand + building = construir una marca.

Para realizar cualquier proceso de branding es necesario primero: encontrar lo que diferencia a tu marca.

Y luego: descubrir a quién le molesta esa rareza que posee tu marca, si haces algo y no le molesta a nadie, es que no has hecho nada.

Hacer branding no es encasillar a una marca y no dejarla respirar, el branding no es lo que decimos al cliente, es lo que el cliente dice de nosotros.

Algunos aspectos del branding:

Brand equity

Es la capacidad de una marca de lograr mayores ventas debido solamente a su notoriedad, si la marca no tuviera la dimensión que tiene, los consumidores quizás elegirían comprar un genérico del producto, más barato.

Brand positioning

Es el lugar que ocupa la marca en la mente del consumidor.

Brand visión

Es a lo que apuntamos que nuestra marca llegue a ser.

Brand delivery

La forma en la que queremos conseguir las cosas, el vehículo en el que se van a mover las acciones que alcanzarán el objetivo de la marca.

Brand promise

El compromiso con nuestro público.

Antes de cualquier campaña de marketing es crucial tener definido el branding, ya que el branding es el enfoque estratégico que una marca va a tomar para diferenciarse del resto.

Luego viene la definición de las publicidades donde se ejecuta el mensaje que queremos transmitir.

El eje principal del branding es la orientación de los valores formulados de la marca hacia el cliente.

El branding debe establecer una ventaja competitiva y una estrategia corporativa.

4 tipos de Branding


Branding de planificación: es cuando se toma el branding como un proceso en donde se pueden planificar repercusiones y ciclo de vida de un producto.

Marcas que se han formado vía planificación:


Branding de experiencia: cuando una marca apunta a provocar una determinada experiencia con sus productos o servicios. Impactar de manera psicológica en el mercado y poder medir ese impacto con respecto a la misma marca.

Por ejemplo:


Branding de imagen: donde la publicidad es la principal herramienta del branding. Todo pasa por el poder comunicativo que la marca pueda desarrollar:


Branding de autoexpresión: